sábado, 18 de abril de 2015

Etapa seis. El dolor conoce tus pasos.

Etapa seis. Triacastela-Sarria. 18km, la etapa más corta de mi camino. Desde Triacastela existen dos itinerarios para llegar hasta Sarria: el meridional, más largo, visita el célebre monasterio benedictino de Samos (lo ví de vuelta de Lugo ayer) y progresa por las frondosas riberas del río Oribio; el otro avanza más al norte por San Xil y se interna también por bonitos parajes poblados de robles y castaños. Opté por el camino del norte, es más corto pero con más desnivel y quería castigar a mi rodilla... Pero mi rodilla me ha castigado a mi. 

Hoy no voy a ser extenso en mi Crónica. Hoy ha sido duro. Muy duro. Pero no por la etapa ya que ha sido la mas corta. Ha sido por el solor agudo de mis ligamentos. La cara interna de la pierna, desde la rodila hacia el tobillo... No me dejaba pisar. Ha sido horrible, he pegado varios chillidos de dolor y no me dejaba avanzar. He querido tirar la toalla varias veces. No habia fortaleza. No habia luz. El paisaje ha sido impresionante y la etapa preciosa. Bosques de castaños con piedra de pizarra. Senderos frondosos y unas vistas a campo abierto inolvidables pero no para mi pierna derecha. Joder. Ha sido horrible. 

He tardado como una etapa normal y aun así gracias que durante los ultimos 8km he descibierto que si pisaba con el exterior del pie no me pegaba el pinchazo ardientr que me hacía saltar. No os penseis que el pinchazo era ocasional. No. Era en cada maldito paso. En cada maldita bajada moría... Horrible. Al descubrir lo del exterior me permitió avanzar mejor y hacer mas de dos pasos seguidos... Y conseguí llegar a Sarria. Alli me hospede en el albergue municipal y me encontré con Paco y Ricardo. Una buena comida con Tatiana y Yasin (una comida preciosa llena de buenos momentos) y una siesta merecida. He sacado dinero en el banco y me he comprado voltaren en crema... 

Despues de la siesta he conocido a una sevillana la mar de maja que empieza su camino aqui. También a un madrileño que lleva desde segovia y se casca 50km día por una promesa religiosa y a una pareja de Malaga que inician como la sevillanan, su camino aquí. Creo que a los malageñis y a la sevillana los veré etapa tras etapa. Eso creo. 

La sevillana ha cenado con nosotros hoy y ha venido el tio de Paco a acabar el camino con él. Parece que no pero ya empieza el final del camino. Para los nuevos soy un veterano... Un tanto curioso.

La rodilla de camino a la cena me ha dado bastante por saco, igual que el tobillo, pero no me voy a rendir. No voy a desistir. No voy a abandonar.
Lo siento si me hago daño pero es lo que hay! Voltarén, reposo por las tardes y ha seguir andando!.

Os dejo algunas fotos de mi etapa tan oscura...

Y bueno... Hoy he caido y mi animo también. Mañana será otro día. Otro día de mi camino. 

Att. Lucas Bueno.

Si estuvieras aquí, llorarías conmigo. No es por mi dolor, es por el tiempo que nos ha perdido. 






2 comentarios:

  1. Tu rodilla no te hará parar... Eres demasiado cabezón! Jajajaja

    Ánimo!! Y cuídate esa pierna... Un beso ;)

    ResponderEliminar
  2. Son las 5 de la mañana, no puedo dormir entonces me puse a leer tu blog. Muy lindo como escribes tu experiencia del camino. Creo que las personas que encuentro en el camino las encuentro por un razon. Gracias por el lindo momento ayer. Sos una persona muy especial!! Y es un honor para mi haberte conocido y compartir unos kilometros del camino contygo.
    Yasin
    (o Josien por el resto del mundo)
    :-P

    ResponderEliminar